Alfredo Cardona Tobòn
Después de la guerra de 1876 el gobierno de Antioquia encargó
al ingeniero Roberto White el trazado de un camino para unir la población del Jardín,
en Antioquia, con la ciudad de Riosucio en el norte caucano. Desde 1857 los paisas habían empezado a poblar esa zona fronteriza;
entraron por la parte alta del Resguardo de La Montaña y fundaron la aldea de
Oraida, luego, en forma lenta pero continua, siguieron por la serranía, en 1870
levantaron la aldea de LLanogrande y poco después a Pueblonuevo en territorio
del resguardo indígena de Guàtica.
No lejos de la trocha trazada por White, don Rafael Tascòn P. explotó una mina de oro con gente llegada de Antioquia y compró al Resguardo de La Montaña una extensa franja de tierra donde estableció una hacienda con una gran casa con un oratorio donde veneró a la Virgen de Las Mercedes. Don Rafael Tascón vendió lotes a colonos paisas y para valorizar su propiedad impulsó la formación de una aldea que llamó Nuestra Señora del Rosario.
Como en los alrededores existían extensos pastizales, los vecinos los surtieron con ovejas y ganado blanco orejinegro . A la ganadería se sumaron cultivos para atender la demanda de las minas de Marmato y Supía, lo que auguró un futuro promisorio a ese poblado alejado de los conflictos, las levas, con agua pura, buena tierra, algunas vetas de oro, excelente clima y una vía , que aunque elemental , llevaba a Riosucio y al sur de Antioquia
.
El 24 de octubre de 1898, día de San Rafael Arcángel, el presbítero Clímaco Antonio Gallón, Vicario de la parroquia de San Sebastián en Riosucio, bendijo la capilla que construyó Tascón en el nuevo pueblo y celebró por primera vez la Santa Misa en esas soledades. Bajo el patrocinio de Rafael Tascón, la localidad de " El Rosario” fue creciendo en tal forma que, un año después era viceparroquia, donde el padre Anselmo José Estrada atendía no solamente a los paisas, sino a los numerosos indígenas chamìes que venían del Chocó a cambiar oro por perros, por cachivaches y bebidas alcohólicas..
En 1900 don Rafael Tascòn cedió su casa para una
escuela y contrató por dos años a un
maestro y a una maestra para que instruyeran a sesenta niños del caserío. El 24
de agosto de 1904 el obispo Nacianceno Hoyos visitó la viceparroquia que según sus palabras consideraba una población próspera
y de futuro inconmensurable.Como en los alrededores existían extensos pastizales, los vecinos los surtieron con ovejas y ganado blanco orejinegro . A la ganadería se sumaron cultivos para atender la demanda de las minas de Marmato y Supía, lo que auguró un futuro promisorio a ese poblado alejado de los conflictos, las levas, con agua pura, buena tierra, algunas vetas de oro, excelente clima y una vía , que aunque elemental , llevaba a Riosucio y al sur de Antioquia
.
El 24 de octubre de 1898, día de San Rafael Arcángel, el presbítero Clímaco Antonio Gallón, Vicario de la parroquia de San Sebastián en Riosucio, bendijo la capilla que construyó Tascón en el nuevo pueblo y celebró por primera vez la Santa Misa en esas soledades. Bajo el patrocinio de Rafael Tascón, la localidad de " El Rosario” fue creciendo en tal forma que, un año después era viceparroquia, donde el padre Anselmo José Estrada atendía no solamente a los paisas, sino a los numerosos indígenas chamìes que venían del Chocó a cambiar oro por perros, por cachivaches y bebidas alcohólicas..
LA GUERRA DE LOS MIL DIAS
El diez de abril de 1900 las guerrillas del poblado de Bonafont dieron muerte
al teniente
coronel Silvestre Serna, comandante de la Plaza de Riosucio y Jefe del Batallón Pedro Orozco; a partir de
entonces los encuentros entre las guerrillas y las tropas del gobierno se
multiplicaron cerca al río Cauca. Pese a la presencia de grupos armados como el de Teófilo
Cataño en las partes altas de Riosucio se vivió en paz durante la Guerra de los Mil Dias. Sin embargo no faltó el desasosiego en la zona de los Paramillos como lo muestran las siguientes notas consignadas en el diario
de Alfredo Gartner Cataño:
“Año 1902- 7 de enero-
Salí para el Chocó aburrido de tanta persecución y con
esperanzas de hacer algunos negocios. Nada hice en materia de peculio y volví
al Rosario el 4 de febrero. El 31 de marzo
nos internamos Carmen ( la esposa), hijitos y yo al Paramillo de
Risaralda, pues allá podía estar libre de que me aprisionaran. En ese tiempo
estuve enfermo de paludismo agudo, pero cuando no estaba con las fiebres, lo
pasábamos muy agradablemente pescando y cuidando unas ovejas de don Rafael
Tascòn, tío de Carmen.”
“ No vivíamos en esas soledades sino los cuatro, una
muchacha sirvienta y un peón Fabián Cardona. Cada ocho días, a veces cada doce o quince según los
percances de la guerra, nos entraba la negra Carmelina el bastimento a través
de la montaña. Nadie nos perturbaba allí , y hasta la demora de los víveres nos
gustaba, pues no sufríamos con los productos de la caza, pesca, chulguines de
palma y la existencia de sal y panela que no se llegó a agotar. Permanecimos
tres meses pero aproximándose una dieta de Carmen volvimos al Rosario el 30 de
junio.”
La persecución contra los liberales continuó después
de la guerra de los Mil Días , por eso numerosas familias liberales emigraron
del sur de Antioquia con destino a las montañas del norte caucano donde
estarían a salvo de los atropellos. Uno de los
destinos de los desplazados por la violencia de ese entonces fue El Rosario,
que en 1903 albergaba mil habitantes y contaba con dos fondas, una pequeña fábrica
de ruanas y cobijas de lana y un molino para el trigo que se producía en la
zona.LOS DESPLAZADOS DE ANTIOQUIA
En noviembre de 1903 llegó al Rosario el padre Marco Antonio Tobón y abrió los libros de la viceparroquia. La primera partida dice lo siguiente:
" En la capilla de Nuestra Señora del Rosario a 24 de noviembre de 1903, el infraescrito coadjutor del señor cura y vicario de Riosucio, debidamente autorizado, bautizó solemnemente a un niña nacida el 21 a las 9 a.m. a quien nombró María Clara Rosas..."
Con el padre Tobón llegaron numerosos colonos antioqueños desplazados de El Jardín por la violencia política desatada contra los vencidos en la Guerra de los Mil Días El sacerdote marcó una gran época para El Rosario: estableció un colegio normalista, instaló una imprenta y apoyó a Rafael Tascòn en el Taller de San José, donde se enseñaba carpintería, zapatería, herrería, estatuaria y tejidos; era una especie de SENA al lado de la selva.
Por gestión del padre Tobón el Obispo Nacianceno Hoyos visitó la viceparroquia de El Rosario el 24 de agosto de 1904, ya se estaban integrando los indígenas chamíes a la civilización y se fortalecía la economía local con el trueque del oro de los nativos por productos de pan coger, ropaza, elementos básicos y el alcohol barato que los embrutecía.
En 1908 la señorita Clementina Ramírez dirigía la escuela de niñas de El Rosario con 60 niñas matriculadas. Componían la Legión de Honor de la institución Teresita Tobón, Teresa Vélez, Carmen Julia Uribe y Margarita Pelaez.
Fabio Espinosa era el director de al escuela de varones con 58 niños y la Legión de Honor constituída por Gerardo Echeverri, Luis A. Uribe, Manuel Zapata, Ernesto Uribe, Pedro Tapias y Ricardo Uribe.
Infortunadamente ese progreso alarmó a los riosuceños que temieron la formación de un poderoso enclave liberal en su territorio que rivalizara con la cabecera. Entonces emprendieron una campaña de difamación contra el padre Marco Antonio Tobón tildándolo de modernista, liberal, aguardentero y rendido admirador de las doncellas negras; a ello se sumó el abandono oficial y los atropellos contra los colonos a quienes destruyeron los alambiques, regaron la miel que traían de Antioquia y los encarcelaron por contrabandistas .
" En la capilla de Nuestra Señora del Rosario a 24 de noviembre de 1903, el infraescrito coadjutor del señor cura y vicario de Riosucio, debidamente autorizado, bautizó solemnemente a un niña nacida el 21 a las 9 a.m. a quien nombró María Clara Rosas..."
Con el padre Tobón llegaron numerosos colonos antioqueños desplazados de El Jardín por la violencia política desatada contra los vencidos en la Guerra de los Mil Días El sacerdote marcó una gran época para El Rosario: estableció un colegio normalista, instaló una imprenta y apoyó a Rafael Tascòn en el Taller de San José, donde se enseñaba carpintería, zapatería, herrería, estatuaria y tejidos; era una especie de SENA al lado de la selva.
Por gestión del padre Tobón el Obispo Nacianceno Hoyos visitó la viceparroquia de El Rosario el 24 de agosto de 1904, ya se estaban integrando los indígenas chamíes a la civilización y se fortalecía la economía local con el trueque del oro de los nativos por productos de pan coger, ropaza, elementos básicos y el alcohol barato que los embrutecía.
En 1908 la señorita Clementina Ramírez dirigía la escuela de niñas de El Rosario con 60 niñas matriculadas. Componían la Legión de Honor de la institución Teresita Tobón, Teresa Vélez, Carmen Julia Uribe y Margarita Pelaez.
Fabio Espinosa era el director de al escuela de varones con 58 niños y la Legión de Honor constituída por Gerardo Echeverri, Luis A. Uribe, Manuel Zapata, Ernesto Uribe, Pedro Tapias y Ricardo Uribe.
Infortunadamente ese progreso alarmó a los riosuceños que temieron la formación de un poderoso enclave liberal en su territorio que rivalizara con la cabecera. Entonces emprendieron una campaña de difamación contra el padre Marco Antonio Tobón tildándolo de modernista, liberal, aguardentero y rendido admirador de las doncellas negras; a ello se sumó el abandono oficial y los atropellos contra los colonos a quienes destruyeron los alambiques, regaron la miel que traían de Antioquia y los encarcelaron por contrabandistas .
Como los colonos llegados al Rosario tenían alas de
golondrina buscaron otros horizontes y con Eduvino Morales y el padre Marco
Antonio emprendieron vuelo hacia el Chocó, al territorio del actual Pueblo Rico.
La leyenda cuenta que al salir , el cura Tobón sacudió el polvo de sus guayos para no llevarse nada que tuviera que ver con Riosucio.
EL OCASO DE EL ROSARIO
Después de un atentado dinamitero contra Rafael Tascòn, la presencia del
mecenas de El Rosario se hizo cada vez más escasa en las tierras altas. Con el éxodo de la
mayor parte de los antioqueños se despobló la aldea y entró en franco
retroceso.; por otra parte al crearse Caldas, las nuevas autoridades de Manizales discriminaron
la zona caucana, en forma tal que el 27 de julio de 1918 suprimieron la escuela de el Rosario por
falta de recursos y el 31 de diciembre de
1920 le quitaron la dignidad de corregimiento.
Para rematar, el viejo camino trazado por White se desvió
hacia Barroblanco; por la calle
empedrada de El Rosario no trasegaron más recuas y al construir las carreteras . las vías quedaron alejadas del poblado. . Poco a poco las casas se
desmoronaron y los rastrojos se apoderaron de los restos de El Rosario, que pasó a la historia como otra de las tantas aldeas fantasmas de este territorio..
Buenas tardes esta súper todo lo que cuentan del Rosario
ResponderEliminarTengo una pregunta ese es el mismo pueblo que un padre lo maldijo y se indio hace aproximadamente 90 años, gracias quedo atento.
Es el pueblo legendario de Balandú, que aparece en la novela La casa de las dos Palmas de Vallejo. Es el mismo pueblo maldito por el cura Tobón-
ResponderEliminarMuchas maestro como siempre disfruto de sus historias que bella es nuestra historia regional gracias
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